Desde la vivencia: “una asamblea pacífica formada por alumnos”

La experiencia le enseña a uno diversos comportamientos de la gente, diferencias radicales en una comunidad, diríamos que cada uno está mirando desde su perspectiva lo que sucede.

En este caso en el tema de educación con las denominadas: movilizaciones que se transforman en marchas, paros, tomas. Pero de las tres me haré cargo de una. Pues el conocimiento parte de la experiencia. Así que esta es la descripción de una toma en el Liceo Luís Cruz Martínez de Curicó. Pero antes analizaremos por qué hay que llegar a esto.

Y nos haremos las siguientes interrogantes: ¿Cómo fue la toma? ¿Qué la impulsó? ¿Por qué se decidió una toma? ¿Cuándo se va terminar? ¿Quiénes la conforman? O ¿Qué se hace en una toma? Son preguntas que tienen respuestas en la medida que se desarrolla la fenomenología (estudio del fenómeno) de este evento.

Primero que todo, diremos que la decisión de la toma se debe a las circunstancias propias en las que se encuentra la educación hoy en día. Por ejemplo: una inequidad en la educación, los particulares exitosos, la educación municipal cada vez más desastrosa.

Otra circunstancia el costo de la PSU. El que tiene dinero accede a una educación superior, claro está, tiene que pagar primero el medio: la prueba vale al salir del colegio: 19.600 pesos. Y si no le va bien la primera vez, tiene que volver a pagar nuevamente con mayor costo: 26.600 pesos. Entonces, un problema la educación como negocio.

El pase escolar debería ser gratuito y con beneficios en actividades culturales: museos, teatros, salas de esparcimiento, etc. Que pueda ser ocupado en todas las regiones y con el acceso a lo descrito anteriormente. Con respecto a los estudiantes secundarios son: 2.600 pesos.

Para los universitarios hay una rebaja según su nivel socio económico (Santiago). Cuando yo estudié en Valparaíso costaba: 6.000 pesos. Nuevamente la educación como negocio e involucrando otras instituciones como la federación de transportes.

Si seguimos con este análisis porque hay un descontento generalizado. Otra propuesta es revisar La L.O.C.E (Ley Orgánica Constitucional de Enseñanza) ¿De qué trata? “el sistema de educación superior y secundaria en Chile fue objeto de una profunda reforma plasmada en la constitución de 1980 y en la legislación de 1981, promulgada durante la dictadura militar y que fija los requisitos mínimos que deberán cumplir los niveles de enseñanza básica y media para su organización y funcionamiento, esta ley tiende a la desregulación de las instituciones educacionales, privilegia la libertad de enseñanza por sobre el derecho a la educación”…

Imagínense las consecuencias, les mencionó una: Un personaje adinerado instala un colegio con fines de lucro, con dudosa calidad académica de sus participantes: profesores, especialistas; y los alumnos y profesores no participan en las decisiones, etc.

Otra consecuencia de la L.O.C.E es que la educación no es pública sino municipalizada. Hay tendríamos para rato en las hipótesis. Por consiguiente el problema de fondo está en el papel que le toca jugar al Estado en el conjunto del sistema educativo.

Y por último la J.E.C. (Jornada escolar Completa) ¿Si hay más horas de educación se repite el mismo programa educativo? ¡Aburrirá esto a los alumnos!, el ministerio dice que refuerza los aprendizajes y el colegio tiene que cumplir con un proyecto educativo.

Así que por todas estas condicionantes que se muestran y demuestran como una fuerza irresistible; y algo que está dado por los acontecimientos a nivel nacional. Primero en Santiago, luego en regiones. Se decidió tomarse el liceo de Hombres. O con palabras más sencillas hay que realizar estas medidas para “sumar presión al Gobierno para que reformulé de una vez por todas el sistema educativo chileno”.

Ahora bien todo el marco teórico de este análisis no sería entendible si no lleva una práctica. En cada Liceo hay un centro de Alumnos o debiera haber. Este organismo es el medio entre los alumnos y el director. Ellos se dieron cuenta y tomaron una medida drástica el movilizarse. Primero con marchas a través de la ciudad y después decidieron la toma.

Valientes ellos y obviamente con los alumnos que acompañan (ideólogos, trabajadores, etc.) a éstos. Se tomaron el Liceo de Hombres el día viernes aproximadamente a las 14:00 horas. Luego de conversaciones con la directiva del establecimiento, la cual aceptó empezó la toma. Ahora bien, dentro del Liceo se encuentran como promedio 60 alumnos. Los cuales con el tiempo se empiezan a conocer y se acostumbran.

Comparten almuerzos, desayunan, y en la noche hacen guardias por turno para cuidar su establecimiento. Lo importante de esto es que siguen reglas de convivencia. Así pasa el tiempo y se siguen organizándose en comités. Algunos de éstos tienen que salir a dar entrevistas, hablar con la gobernadora o dirigentes municipales, etc. o con los otros alumnos de otros establecimientos en toma. Por ejemplo: el liceo de niñas.

Así la vida transcurre a estos jóvenes que les toco asumir responsabilidades; que a más de alguno cambiará, porque quizá se comporta mejor que antes y con más compromisos aceptados. En estos jóvenes se está reflejando el rol protagónico que tienen que asumir de una vez por todas. Y como se organizan bien, se respetan, escuchan, solidarizan unos con otros; aprenderán a tener confianza, a tener voz, a mejorar su autoestima. Por que ellos se tomaron en serio la toma.

Y lo más espectacular ¿dónde están los profesores? Digamos que si los acompañan y les envían en la medida de lo posible: alimentos, consejos; y estar con ellos un rato compartiendo mientras pasa el tiempo. Bien eso es una toma “una asamblea democrática donde cada uno es tan importante como el otro”.

Entonces los alumnos por fin dejaron de ser meros espectadores pasaron a ser actores y asumieron el costo y beneficio que les puede ocasionar este evento en particular. Una toma indefinida. Que a mi juicio es un beneficio y algo justo pero que implica sacrificios y conciencia generalizada por los estudiantes participantes.