Cinco cosas que nunca debes hacer para Año Nuevo

Año Nuevo es un momento especial, cargado de buenos sentimientos y pensamientos positivos para el año que se avecina. Pero ojo, que hay cosas que te aconsejamos evitar, pues podrían poner en riesgo toda la fortuna apostada en las cábalas para esa noche.  

No ponerse a pelear: Es lo peor que puedes hacer si estás compartiendo en familia o amigos. Es por eso que debes evitar los temas de conversación que generen discordia o puntos de conflicto. Al contrario, puedes poner sobre la mesa asuntos triviales y también de proyección positiva. Recuerda que la noche de año nuevo, y los doce primeros días de enero, marcan una pauta de cómo será el año que comienza.

Evitar caídas: Aún recuerdo cuando en una celebración de año nuevo familiar, una primera tropezó con su vestido y se cayó faltando segundos para la medianoche. Tuvo mala suerte todo el año. Es por eso que te aconsejamos estar tranquilo frente a los minutos previos a dar la bienvenida al 2016. La algarabía se apoderará de todos cuando sean las 12, y de ahí en adelante disfruta de las celebraciones de este nuevo año.

No pasar debajo de una escalera: Tradicionalmente esta acción dicen que genera mala suerte, pero más aún en una noche especial como la de año nuevo. Es por eso que te aconsejamos evitarlo, pues lo que queremos para este momento es atraer las buenas vibras para repartirlas en todo el año.  

No tomar champan cuyo corcho no haya saltado: La celebración de la medianoche entre el 31 de diciembre de este año y la madrugada del 1 de enero tiene que iniciarse con un buen champañazo, efervescente, de abundante espuma, cuyo corcho salte y derrame gran parte de la bebida alcohólica sobre los festejantes. Sólo con estas características se augura la fortuna para el 2016. Si éste no salta, y por el contrario, da un leve y apagado sonido, lo mejor es no beberlo, pues la mala suerte podría acompañar el sorbo.

No acordarse de cosas ni momentos tristes: Junto con barrer las malas vibras y momentos, es necesario concentrar las energías en dar vuelta la página y empezar el 2016 con la “hoja en blanco”. Ya no se saca nada con llorar por la leche derramada. Lo que sucedió ya es pasado y lo hecho, hecho está. No es bueno recordarlo, más bien, proyectemos un nuevo año con toda la energía positiva para que los proyectos y los anhelos lleguen a buen puerto.