Sin importar la dieta que estés siguiendo, siempre existirán tentaciones irresistibles que la harán correr peligro. Entonces, prepara tu mente y sigue estos sencillos consejos que te permitirán seguir tu dieta sin culpas y con buenos resultados.

1. Anticípate

Si vas a ir a una fiesta o vas a tener invitados en tu casa, come algo apropiado antes de ir. La idea es no acabar devorando la primera bandeja de aperitivos al momento de llegar. La opción puede ser una taza de leche descremada con cereales o fruta. Pero, si no tendrás tiempo para comer antes de la fiesta, procura picar de los alimentos menos grasos, ya que si rompes la dieta, que por lo menos no sea tan excesivo.

2. Bebe agua

Cuando sientas hambre entre las comidas que establece tu dieta, prueba beber un vaso de agua para ayudar a llenar el estómago y mantener el hambre a raya. Cuidado con las aguas saborizadas, muchas de ellas contienen azúcar, prefiere siempre el agua natural y no gasificada.

3. Abastécete de fruta deshidratada

Son fáciles de conseguir en cualquier supermercado y lo esencial, son bajas en grasa y alta en fibra. Un buen puñado también cuenta como una de tus raciones diarias de fruta.

4. Si ni lo ves, no lo querrás

Para no tentarte cuando estás en casa, no compres ningún alimento alto en grasa: papas fritas o pasteles. Simplemente debes dejar de recorrer esos pasillos en el supermercado y comprar solo lo que realmente necesitas. Al mantenerlos fuera de la vista, no sentirás la tentación.

5 Bebe alcohol con moderación

Aunque el alcohol no contiene grasa, un vaso pequeño de vino suma muchas calorías. Para evitar esto, prueba el vino alternando con agua mineral o prefiere una copa de champaña, que contiene mucho menos calorías.

Recuerda que cualquier dieta que hagas será más efectiva si la acompañas de ejercicios y que no existe, lamentablemente, una dieta milagrosa.

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