Una indemnización de $30 millones deberá pagar el Hospital San Juan de Dios de Curicó a una paciente que perdió su ojo debido a los "malos tratamientos" prestados en el recinto asistencial. La condena fue fallada por la Corte Suprema.  

Según consignó Biobío, la pesadilla de la afectada comenzó la mañana del 17 de noviembre cuando ésta recibió el golpe de un trozo de piedra en su globo ocular, mientras realizaba labores de limpieza de hortalizas. Producto del impacto presentó dolor y sangramiento, por lo cual concurrió al centro de salud.

En el hospital fue atendida por dos médicos. La publicación detalló que el primero solo le recetó un ungüento oftalmológico; por su parte el segundo -en una atención posterior-, le ordenó tomar ketorolaco, betametasona y metamizol, "con indicación de presentarse al policlínico de urgencia oftalmológica".

ESFUERZOS MÉDICOS

La víctima siguió las instrucciones formuladas por los doctores, sin embargo su condición de salud empeoró, por lo cual acudió a otros servicios de salud. Lamentablemente ya era muy tarde y, a pesar de los esfuerzos médicos, su cavidad ocupar debió de ser vaciada, debido al daño sufrido.

La mujer quedó con una prótesis ocular, la cual deberá renovar cada cinco años.