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Un hombre lloró de impotencia durante una audiencia realizada en el Juzgado de Garantía de Talca, luego de haber sido acusado falsamente de golpear y robar la bicicleta de un joven de 18 años.

Esta acusación falsa –consignó El Centro [10]- quedó de manifiesto, porque de acuerdo a los antecedentes expuestos en la misma audiencia judicial, se logró determinar que el presunto victimario era en verdad la víctima. El hombre solo había increpado al muchacho que días antes había asaltado a su hijo.

“Yo estoy encadenado y él como blanca paloma”, indicó visiblemente emocionado el sujeto, quien es un padre de familia de 42 años, que maneja un taxi colectivo y tiene dos hijos.

HISTORIA

Según el relato del matutino, el lunes pasado un joven de 18 años denunció en Carabineros que un sujeto lo había golpeado y le había robado su bicicleta. Para ello acreditó lesiones en su mano y brazo izquierdo. Con denuncia en mano los uniformados finalmente dieron con el paradero del padre de familia y lo detuvieron. No solo eso, la fiscalía presentó cargos criminales por robo con violencia y solicitó la prisión preventiva del detenido.

Lo que no sabía el Ministerio Público, agregó El Centro, es la versión que expuso la Defensoría Penal Pública, la cual indicaba que el acusado solo increpó a un joven que dos semanas antes había asaltado a uno de sus hijos.

Esta situación fue solventada por una denuncia presentada previamente por un niño de 14 años ante Carabineros, la cual acusaba a un joven –que calza con la descripción del verdadero asaltante-, quien lo habría amenazado para robarle su teléfono Smartphone. Este relato calzaba con el testimonio del padre, por lo cual se abaló la versión de la Defensoría.

“Como padre me sentí ofuscado y lo increpé. Cuando él se arrancó, dejó botada la bicicleta y yo se la entregué a los carabineros. Ahora estoy encadenado y él como una blanca paloma”, puntualizó el hombre injustamente detenido. Producto de todo lo antes expuesto, el hombre quedó en libertad, pero citado a declarar.