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En completo misterio se mantienen las municipalidades de Talca y Curicó, sobre el espectáculo pirotécnico tradicional en Año Nuevo, debido a los hechos violentos registrados en la Región del Maule, tras 28 días de manifestaciones.

En primera parte, el alcalde Juan Carlos Díaz, de Talca, espera a fin de mes tomar la decisión de cortar el show que los residentes de la capital del Maule están acostumbrados a ver al borde del río Claro. Y no lo es todo, puesto que el Festival de la Independencia se vería suspendido por la situación que atraviesa la zona.

Por otro sector, el edil de Curicó, Javier Muñoz, presentó ayer una agenda local las cuales constan de medidas de suspensión de show pirotécnico, y los recursos que iban a ser ocupados en los fuegos artificiales, iría a programas medioambientales. 

Se espera que a final de mes los ediles de las comunas tomen la determinación.