patricio_gaete_2020_06_23.png [10]

Corría el 1 de mayo de 1997 y Gustavo Cerati anunciaba a través de una carta abierta la separación (oficial) de Soda Stereo. Esto, después de casi 2 años de la vuelta a los escenarios de la banda argentina durante la cual editaron el disco “Sueño Stereo” y un álbum para la cadena televisiva MTV “Confort y Música Para Volar”. Posteriormente, Soda realizaría una serie de conciertos de despedida para finalmente colgar sus instrumentos ante un Monumental de Núñez lleno a más no poder.

Es en este contexto donde se empieza a gestar “Bocanada”, segunda placa de su discografía que cumple el próximo 28 de junio 21 años desde su publicación. Si bien, en 1993 Cerati ya había lanzado un disco en solitario “Amor Amarillo”, es a partir de Bocanada donde el exlíder de Soda Stereo comienza una carrera que lo terminaría de catapultar como una de las figuras más importantes del rock latinoamericano de todos los tiempos. 

Grabado casi en su totalidad en “Casa Submarina”, estudio del argentino ubicado en su hogar, este segundo disco presenta a un Cerati mucho más complejo en términos de creatividad musical, además da rienda suelta a su faceta electrónica que ya venía desarrollando en sus últimos trabajos con Soda Stereo y en otros proyectos paralelos como Cerati/Melero (“Colores Santos”) y Plan V, este último donde compartía labores junto a músicos chilenos.

Siempre he pensado que el primer track de un disco es fundamental, te debe enganchar y hacer que pongas atención inmediatamente, también te debe dar una especie de pista de lo que será el resto de la placa. Todo lo anterior se ve reflejado en “Tabú”, canción que de golpe te hace mirar al reproductor de música y escuchar atentamente lo que se viene.

Ésta comienza con una potente secuencia de batería a la cual se suma un sample extraído de “Waltz For Lumuba” de The Spencer Davis Group, una base de bajo y finalmente una guitarra Gibson ES-335, la que utilizó posiblemente en la gran mayoría del disco, y digo posiblemente porque Gustavo era el tipo de artista que nunca se casó con un modelo de guitarra definido, sino que más bien iba experimentando con distintos tipos de marcas, tales como PRS, Parker, Jackson, Fender y Gibson, por nombrar las más legendarias. Por otro lado, es la voz de Cerati la que se lleva el crédito en esta pista pues es con ésta que le va entregando a la canción cuotas de dulzura y sufrimiento a la ya exquisita pieza instrumental.

El uso de máquinas y tecnología es una de las características más interesantes del disco, destacando la utilización de un sampler MPC de la marca Akai, una de las armas secretas de Cerati durante muchos años. Dicho lo anterior podemos abordar “Engaña”, que contiene extractos de “Circle of Love” de Steve Miller Band y “The Adventurer” de John Barry, y en la cual Gustavo toma prestada la esencia del primer sample mencionado, cambiando la progresión de notas pero manteniendo el humor de ésta. Vale destacar que en la letra el argentino reflexiona acerca de la paranoia que surge después de una relación fallida.

“Bocanada”, que le da el nombre al disco, es una canción con la cual Gustavo tuvo problemas con la adquisición de los derechos del sample utilizado (“Eruption” de Focus), resultando finalmente en la cesión de los derechos de toda la canción para la banda Neerlandesa. En esta pista Cerati habla de la distancia emocional entre dos personas y se luce con una bella interpretación vocal.

Con una melodía más alegre que las presentadas en la tríada anterior en “Puente” el trasandino le da un poco de descanso a su sampler y sintetizadores para retomar la fórmula más conocida por todos, una mezcla de un poco de Soda y algunas influencias británicas. Esta canción se transformó en una de las más populares del disco.

Otra canción de este elepé es “Beautiful” una de las pocas donde la guitarra acompañada de efectos como el trémolo y un delay, toma un papel principal que le da un ambiente de relajo a la canción y también un contexto a la letra, la que se refiere a la sensación de gozo que le causa a Gustavo el proceso de grabación. Además la pista tiene un sample de “Prelude to Afternoon of a Faun" del compositor de música clásica Claude Debussy.

Para mí “Perdonar es Divino” es una de las mejores interpretaciones vocales del argentino a pesar de no ser la mejor cantada, pero sí una de las que más transmite. Encima de una capa de secuencias e instrumentos orgánicos, Cerati habla de la falta de comunicación entre las personas y que se alzó como una de las favoritas del trasandino.

Uno de los tantos puntos altos de esta placa es “Verbo Carne”, una obra épica grabada en los estudios Abbey Road, que cuenta con la participación de la orquesta sinfónica “The London Session Orchestra” y con un sample de “Feel” de The Verve. Esta es definitivamente la pieza mejor producida del álbum.

“Raíz” es el primer sencillo que solo tuvo difusión radial. Es prima hermana de “Cuando Pase el Temblor”, debido a su ritmo e influencias del folclor altiplánico y al uso de instrumentos similares a los utilizados en la legendaria canción. En ambos casos fueron generados por un sampler y sintetizadores. Contiene una muestra de “Del aire al aire” de la banda chilena Los Jaivas y el inicio de “Hyperactive!” de Thomas Dolby.

Otra de las canciones que más se reconocen de este álbum es “Paseo Inmoral”, en la que Cerati desenfunda su guitarra PRS y muestra su faceta más rockera, obviamente mezclándola con la electrónica y con un sample de “Rock and Roll Part 2” de Gary Glitter. Otra de mis favoritas, principalmente por sus solos e improvisaciones en guitarra.

Dentro de mis preferidas está “Alma”, track en el que Cerati se asocia con un viejo amigo, Flavio Etcheto y crean una secuencia algo hipnotizante y un poco perturbadora, la que está acompañada de la letra creada por Etcheto, lo que da como resultado una canción que para mí se siente como estar en un sueño.

Bocanada es una obra esencial, no solo para los fanáticos de este músico, sino para entender la evolución del rock y de la música latinoamericana. A diferencia de “Amor Amarillo”, que es un disco más íntimo, en esta placa Cerati acerca la electrónica al público masivo y presenta una placa más ecléctica que todas las anteriores y las que vendrán, consiguiendo también un tremendo éxito comercial.

Es en este disco donde la idea de plagio circuló con más fuerza en las voces de muchos escuchas -pero para mí- copia o inspiración, no opaca la figura de genio musical que Gustavo Cerati cultivó en el pensamiento de millones de fanáticos.

Con base en lo anterior me planteo: ¿habría sido yo capaz de lograr lo mismo que logró Cerati con todos los samples seleccionados? ¿Habría sabido cómo utilizarlos en mis diferentes creaciones de la misma manera que lo hizo el trasandino? Indudablemente la respuesta es negativa y es ahí donde para mí finaliza esta polémica y entretenida discusión, pues el talento de Cerati mezclado con la obsesividad y visión que poseía, es algo que naturalmente no se da y no es fácil de encontrar.