¿Qué onda con Morales?

20 Enero 2006
El presidente electo de Bolivia señaló que no será “charlatán” con el tema del mar boliviano y que apelará a los países vecinos de Bolivia, “a la comunidad internacional y muy especialmente al pueblo chileno”. Su prudencia me ha sorprendido.
Sebastián J. Ec... >
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Evo Morales siempre me ha generado desconfianza. Me da mala espina su condición de líder cocalero y la relevancia que tiene para el mercado ilegal una salida soberana al mar para Bolivia. Sin embargo, una vez electo, Evo parece mostrar una nueva cara, una cara mucho más amable que la que mostraba cuando era candidato o la que muestran hoy los candidatos a la presidencia de Perú.
En un país donde la estabilidad social es mínima, donde el sistema de partidos políticos no funciona y a cambio son los movimientos populares, campesinos y gremiales los que ejercen las presiones para hacer andar el país, Evo Morales –y cualquier presidente boliviano– tiene una difícil tarea: lograr la estabilidad política y social y, al mismo tiempo, propiciar los cambios necesarios para resolver las profundas problemáticas que urgen al pueblo boliviano.
En el ámbito internacional, Evo ha sido muy astuto. La invitación personal que hizo al presidente Lagos, la gira que hizo por Europa –sacándole excelente provecho a la broma que le jugó una radio española–, alinearse con el proyecto latinoamericanista de Chávez y crear una imagen sencilla y consecuente con el pueblo boliviano con su ya famosa chompa presidencial, son características que nos hacen hablar ya no de un Evo Morales nacionalista y radical, sino de un presidente prudente y hábil. Características que aún tiene que probarlas, si bien, al concierto internacional, más importante aún, a los propios bolivianos.

Comentarios

Imagen de Pedro

Solamente el pueblo

Solamente el pueblo boliviano es el ùnico juez vâlido para catalogar al Presidente Evo Morales. Quizàs la causa de que el autor del artìculo se "sorprenda" es que no conoce la trayectoria polìtica y el pensamiento del lîder ìndigena. Referirse una vez màs a la chompa me parece màs bien un comentario farandulesco. Lo que sì sorprende de veras es el tono "familiar" que emplea en su escritura y da la impresiòn que està hablando de un vecino de casa y no de un mandatario que merece todo nuestro respeto. Si entendemos esto por "periodismo ciudadano" creo que equivocamos de vìa.