¿Cómo saber qué mueble de exterior escoger?

A la hora de querer empezar a decorar el hogar hay varias cosas que uno debe plantearse y lo primero es definir qué estilo se le quiere otorgar a cada ambiente y espacio. El estilo va principalmente definido por el gusto de cada persona y del uso que se le da. No solo basta con encontrar el mueble más bonito del mercado, como por ejemplo un juego de terraza rattan, ya que, si éste no cuenta con, por ejemplo, rattan sintético, no va a ser tan eficiente con los diferentes climas. Esto es ya que el rattan natural, al provenir de una planta trepadora, es un material ligero de fibras largas y flexibles, que a pesar de ser casi irrompible, no es tan bueno contra diferentes climas como el sintético, ya que no requieren mantenimiento, es resistente a factores ambientales, es flexible y duradero, lavable con agua, ligero, ecológico y además tiene un aspecto natural. Es importante saber este tipo de cosas ya que, si nos encontramos en sectores costeros, necesitamos que nuestros muebles sean, por ejemplo, resistentes contra el agua salada.

Otro factor muy importante a tener en consideración a la hora de empezar la búsqueda de muebles es tener claro la cantidad de sol directo que recibe la zona donde vamos a posicionar cada uno de los muebles, ya que el sol puede causar que estos vayan perdiendo su color original y adquieran un tono grisáceo con el paso del tiempo. Para evitarlo y ya que esto sucede generalmente cuando pasan demasiado tiempo seguido expuesto, es conveniente tener cortinas o paneles en las terrazas abiertas, donde estas puedan estar cerradas cuando no se esté utilizando y así evitar el contacto prolongado. Sumado a esto es importante tener en cuenta si los muebles a utilizar contarán con algún cobertor o elemento extra como cojines, ya que, de ser así, se puede ir jugando con los diferentes usos de este.

Finalmente es sumamente importante saber quiénes serán, principalmente, los que habitan ese espacio, ya que la decisión a tomar va a depender mucho si hay niños pequeños o no. Esto es principalmente para evitar la compra de muebles muy delicados o con materiales que sean fáciles de manchar, dado que son en estas zonas de la casa donde más se juega, en especial en el verano. En caso de que la presencia de niños sea menos frecuente, se puede optar ya por opciones más delicadas o más enfocada en el diseño que en otras características como la ya mencionadas anteriormente.