Demanda de familiares de víctima de tsunami: conoce aquí el veredicto de la Corte de Talca

Demanda de familiares de víctima de tsunami: conoce aquí el veredicto de la Corte de Talca

26 Noviembre 2017

Nelly Cheuquelén (23) fue una de las 45 víctimas del tsunami de 2010 en la zona de Pelluhue. Su familia demandó al Estado, al cual responsabilizan de la tragedia.

Equipo >
authenticated user Editor

La Corte de Apelaciones de Talca decidió rechazar una millonaria demanda entablada por los familiares de Nelly Yamilet Cheuquelén Añiñir (23) una de las 45 personas que fallecieron en el camping Curanipe, en la comuna de Pelluhue, producto del tsunami que sucedió al terremoto del 27 de febrero de 2010.

Uno de los argumentos presentados por la familia era la “falta de servicio” que la demanda atribuye al Estado, en su deber de cuidado sobre los ciudadanos. “No se advierte cuál sería el servicio que debía prestarse en el lugar donde pereció Nelly Cheuquelén, salvo indicar de manera genérica ciertos errores en que habría incurrido el SHOA y otros entes estatales, como la Onemi”, declaró la corte, y añadió que “no se vislumbra relación de causalidad entre el fallecimiento de Nelly Cheuquelén con alguna acción u omisión atribuible al demandado, en atención a que en el caso particular no se advierte de qué forma los agentes estatales pudieron evitar su fallecimiento por inmersión”.

La sentencia lleva la firma del ministro, Moisés Muñoz, actual presidente de la Corte de Talca, junto al ministro (s), Álvaro Saavedra, y la abogada integrante, Silvia Espinoza. En todo caso, a la fecha existe plazo legal para que la parte demandante presente un nuevo recurso legal y el caso civil, finalmente, llegue a manos de la Corte Suprema

Cabe recordar que en total fueron presentadas cuatro demandas en nuestra región relacionadas con víctimas del tsunami del 27/F, todas en el Primer Juzgado de Letras de Talca. Allí solo se acogieron dos acciones legales por víctimas de la isla Orrego, en Constitución. En total, las demandas exigían una suma que bordeaba los cuatro mil millones de pesos, como indemnización por daño moral a favor de los familiares.