En el contexto de la actual crisis universitaria y entendiendo los distintos procesos que se han llevado a cabo en las últimas semanas, la asamblea de estudiantes de medicina de la Universidad Católica del Maule declara lo siguiente:

Con fecha 25 de Noviembre, a través del análisis de la actual coyuntura y posterior votación, la asamblea de medicina, con una histórica concurrencia de 164 estudiantes y 154 votos a favor (representando el 93,9% de los presentes), ha convenido adherirse al proceso de movilización mediante la paralización de sus actividades académicas.

Respecto a lo anterior, consideramos, en acuerdo con las demandas planteadas por parte de la comunidad universitaria, que es imperante la necesidad de mostrar y trabajar por instaurar transparencia en cuanto a la administración de nuestra casa de estudios y, de igual forma, compartimos la visión de un trabajo más participativo, más democrático, en donde sea la comunidad quien a través de la organización construya un norte estratégico, incidiendo plenamente en las decisiones de la universidad, como también en la administración del mismo.

Por otro lado, si bien Rectoría se ha retractado en las medidas que impulsara en cuanto al arancel y matrícula, queremos dejar en claro que aún persiste una multa inusitada del 40% en relación a la matrícula para todos aquellos que cancelen posterior al 11 de marzo (incrementándose de $140.000 a $198.000 por alumno) y, que independiente de todo, los aranceles siguen subiendo cada año sin encontrar una justificación alguna.

Si bien entendemos, y no sólo en el contexto actual, que esta situación responde a una problemática de fondo y que va más allá de nuestra realidad universitaria, creemos que no podemos dejar pasar este concepto de universidad que nuestras autoridades han tomado respecto concebirla como una empresa.

Estas medidas solo han de entender al estudiantado como un ente que sustenta lo financiero, no haciendo de la universidad un lugar en donde se genere conocimiento, sino por el contrario, pues se construye una educación basada en la capacidad de pago de cada estudiante. Por ello, hacemos un llamado a no desconocer el contexto universitario y avanzar hacia la construcción de una casa de estudios que vea a cada persona de la comunidad universitaria como ente participativo, como sujetos que buscan aportar a la sociedad sin importar su posibilidad económica.

Por lo tanto, medicina se moviliza para dejar constancia de que no podemos seguir avanzando sin construir con transparencia, no podemos seguir caminado sin forjar una universidad, una casa de estudios en donde cada estamento trabaje en conjunto para aportar a una sociedad nueva, una sociedad mejor.

25 de noviembre de 2013, CAA Medicina UCM.