Un estudio estadístico del portal web Separadosdechile.cl revela que desde abril 2004 a mayo 2012, de un universo de más de 43.300 usuarios que se separaron de su pareja conyugal , tres de cada cuatro manifestaron que el quiebre matrimonial se gatilló por faltas que la ley califica como violación grave de los deberes y obligaciones que les impone el matrimonio, como son las infidelidades reiteradas y/o malos tratamientos graves de su pareja o propias y, en el 92% de estos casos, al momento de decidir la ruptura definitiva, la falta se había cometido dos o más veces.

"La ley de divorcio desnudó al chileno. En estos últimos 8 años, las cifras son demoledoras a la hora de analizar su comportamiento en el matrimonio toda vez que transparentó costumbres inveteradas de nuestro pueblo. Las estadísticas delatan actitudes cada vez más egoístas, irrespetuosas y agresivas en las relaciones de pareja. Engañar al marido o la esposa, o agredirla, física o verbalmente, son actitudes más habituales de lo que se cree y piensa. Con los actuales índices de quiebres matrimoniales, cada vez menos se salvan de sufrir estas vergonzosas conductas. Sin embargo la víctima, en nueve de cada 10 casos, perdona la falta y otorga una nueva oportunidad al culpable. Sólo decide separarse al convencerse por sí sola, o considerando la opinión de terceros, que el indebido comportamiento de su pareja es reiterativo, crónico y que no va a cambiar", afirma Ricardo Viteri, titular del portal web especializado en rupturas matrimoniales y divorcios.

En los meses de mayo y junio 2012, de acuerdo a las estadísticas de Separadosdechile, las infidelidades y violencia intrafamiliar se ubican una vez más entre las principales causas basales de separaciones matrimoniales, representando el 58% y 16% respectivamente, del total de quiebres matrimoniales.

Los engaños extramaritales registraron en los últimos dos meses un aumento de 2 puntos respecto al periodo enero a abril, mientras que las rupturas matrimoniales por agresiones domésticas anotaron un incremento de 4 puntos.

La tendencia, en ambos casos, es al alza. Los divorcios no se presentan de inmediato como culposos sino al año o tres años después, como divorcios consensuados o unilaterales, por las dificultades para probar las infidelidades reiteradas o la culpabilidad grave en caso de violencia intrafamiliar.