Televisión digital: los aspectos claves que deberá zanjar el Senado

www.bcn.cl

El lunes 2 de mayo del 2011 la Comisión de Transportes y Telecomunicaciones del Senadoinició el segundo trámite del proyecto de ley que permite la introducción de la televisión digital terrestre en nuestro país.

Ya aprobada por la Cámara de Diputados, la iniciativa propone en lo fundamental, acelerar el proceso de instalación de la nueva tecnología en Chile, acortando a tres años el plazo máximopara que los actuales canales de televisión abierta repliquen su cobertura analógica actual en formato digital, en un 85 % del territorio nacional, y a cinco años para cubrir el 100 %.

También introduce la obligación de transmitir cuatro horas de programación cultural a la semana y especifica que el 40 % de las concesiones asignadas serán destinadas a señales de libre recepción, regionales, locales, comunitarias y aquellas nacionales o regionales que el Consejo Nacional de Televisión (CNTV) califique como culturales o educativo-infantiles.

Otro de los puntos clave del proyecto es poner un plazo de 20 años de duración para las nuevas concesiones televisivas otorgadas por el mismo, aunque manteniendo el carácter indefinido de las concesiones otorgadas antes de 1970.

Los concesionarios podrán destinar hasta el 50 % de su espectro radiológico para levantar señales de televisión pagadas, con la condición que dentro del porcentaje de señal abierta se disponga de al menos una señal de alta definición gratuita.

Precisamente, son estos elementos fundamentales del proyecto de ley en discusión los que dividen opiniones entre parlamentarios. Las discusiones han puesto el tema de nuevo en agenda pública: el martes 3 de mayo del 2011 se realizó en el Congreso enValparaíso el Coloquio “Demandas Ciudadanas para la TV Digital Terrestre” en la que participaron parlamentarios del distintos partidos.

Desde la Comisión de Cultura de la Cámara de Diputados, su presidenta, la diputadaXimena Vidal (PPD), valoró que el acuerdo político alcanzado durante el primer trámite del cuerpo legal “permitirá acortar los plazos para que la televisión digital sea una realidad en nuestro país”, destacando especialmente “el aumento de una a cuatro las horas de contenido cultural para los canales de televisión que utilicen la televisión digital”.

Andrea Molina (UDI), integrante de la misma comisión señaló que gracias al cuerpo legal aprobado en primer trámite “muchos más chilenos tendrán acceso a la información, además de que ésta pueda llegar a diversos lugares de nuestro país”, valorando además que “tengamos la posibilidad real y concreta de tener una televisión que genere este tipo de propuestas y espacios (culturales), lo que permitirá ir en directo aporte a la cultura y al desarrollo de nuestro país”.

Sin embargo, en contraposición a esta visión, senadores de la Democracia Cristiana han planteado sus reparos con la iniciativa que ahora deberán analizar, afirmando incluso que ésta podría quedar obsoleta antes de ser despachada.

“Ojalá podamos dar a conocer por los medios de comunicación lo que está en juego, porque muchas personas creen que la televisión digital es la pantalla o cómo será la imagen que van a ver y no saben lo que está comprometido en esto, manifestó la senadora Soledad Alvear (DC).

A mí me parece que las concesiones deben tener un plazo, no pueden ser indefinidas y que éstas deben ser otorgadas por un órgano independiente al gobierno de turno, de manera que el Consejo Nacional de Televisión tenga muchas más facultades para evaluar, y que no se consideren sólo razones técnicas, sino también las líneas editoriales”, agregó la senadora.

El diputado Felipe Harboe (PPD) calificó como una “aberración” que los nuevos concesionarios de televisión digital puedan cobrar hasta por un 50 % de sus contenidos. “El espectro radiológico es un bien nacional de uso público y lo que hace el Estado es concesionarlo. Yo creo que hay que garantizar la televisión gratuita para todos”, sostuvo.

Sobre el fomento de estaciones televisivas regionales, el parlamentario recordó que “el objetivo original del proyecto era más y mejor televisión para todos, resaltando los valores y la identidad local. La definición de canales regionales o locales que salió de la Cámara de Diputados es muy mala porque se fija en relación al lugar de ubicación del canal y no al origen del contenido. Podría darse el caso que un canal de cobertura nacional instalara en una región una antena repetidora de la señal nacional y se le considere canal local. Ése no es el sentido de la ley”.

Para el senador Gonzalo Uriarte (UDI) el proyecto de ley está bien en términos generales, aunque igualmente considera que “hay varios puntos todavía por corregir”. De todas maneras, el legislador advirtió que se debe considerar que el objetivo fundamental de la denominada Ley de Televisión Digital es que se transforme en “un instrumento que cumpla una función en un tiempo en que el cambio de las tecnologías es muy vertiginoso y las reglas del juego del modelo de negocios también van cambiando”.

Agregó que “acá hay muchos conflictos comerciales legítimos, pero en disputa y nosotros no podemos transformarnos en un tribunal. Tenemos que buscar el bien común, respetar derechos adquiridos, pero también permitir que haya competencia”.

Sobre este punto, el diputado Harboe expresó que este proyecto de ley “dice muy poco sobre los contenidos” y ha desembocado en una ley que sólo regula un modelo de negocios: “La televisión abierta hoy día es gratis y con la ley de televisión digital será, en parte, de pago y eso es inaceptable. Aquí se está tratando de solucionar los eventuales problemas económicos de la industria de la televisión por sobre lo que corresponde, que es defender a los ciudadanos cuando hoy el 68 por ciento de los chilenos sólo accede a televisión abierta.

Bases de la discusión

El proyecto de ley sobre televisión digital fue ingresado como mensaje del Ejecutivo, durante el mandato de la Presidenta Michelle Bachelet, el 08 de noviembre de 2008. Su objetivo fue introducir la televisión digital en Chile, mediante el otorgamiento de las competencias y facultades necesarias al Consejo Nacional de Televisión (CNTV).

Modifica, por tanto, la Ley Nº 18.838 que crea dicho organismo para fortalecer su institucionalidad, establecer programas de subsidio a la programación de la televisión abierta y facilitar el proceso de transición entre la televisión abierta análoga y la futura televisión abierta digital.

Durante dicho período de transición, los usuarios deberán tener la posibilidad de acceder a la transmisión simultánea en analógico y digital (“simulcasting”), es decir, los operadores que tengan concesiones analógicas deberán reproducir la misma programación en señal digital.

Cabe señalar que el actual escenario de la industria televisiva comenzó a gestarse en 1970, cuando se dictó la Ley N° 17.377 que estableció que sólo el Estado (representado en Televisión Nacional de Chile) y las universidades que se indicaba podían poseer y administrar concesiones televisivas con carácter indefinido.

En 1989, mediante la Ley N° 18.838, se instaura el principio del acceso abierto de los privados a la propiedad de las señales de televisión, manteniendo el sistema de concesiones de duración indefinida hasta 1992 cuando la Ley N° 19.131 estableció un plazo de 25 años para las que se otorgaran de ahí en adelante, lo que terminó configurando un sistema mixto.

Beneficios de la televisión digital

Según establece en sus fundamentos el Mensaje del Ejecutivo, la mayor eficiencia y capacidad espectral de la señal digital permite realizar transmisiones en un contexto de mucha mayor flexibilidad que la actual, pudiendo emitirse una señal en alta definición o múltiples programas con calidad estándar, la que de todas maneras representa una mejora importante respecto a la actual señal analógica, asemejándose en calidad a la que hoy es posible obtener en un video en formato DVD.

A diferencia de la televisión analógica, que hoy día utiliza principalmente los canales del 2 al 13, la televisión digital se implementará entre los canales 21 y 51 en la banda UHF, lo que permitirá disponer de una mayor cantidad de frecuencias para la prestación de este servicio.

Gracias a estas potencialidades, la tecnología digital permite ampliar la diversidad programática de la televisión abierta de libre recepción, favoreciendo con ello especialmente el desarrollo de medios regionales, locales y comunitarios, y brindando también a los actuales canales la posibilidad de expandir su oferta televisiva, a través de señales adicionales.