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Desdichada ha sido la campaña del Rojinegro, pobre por donde se le mire, mezquina desde la concepción, débil en los resultados, y asfixiante en el presente. Como un triángulo de vida se tomó la victoria de ayer sobre Valdivia, un triunfo que urgía como si la vida dependiera de ella, un triunfo que solo se explica por la precariedad futbolística de la visita y ciertos derroches de inspiración de un Rangers más acostumbrado a la mediocridad.

Poco y nada de fútbol hubo en la primera fracción, el juego desasociado de los piducanos aumentaba el nerviosismo que habitaba de temprano en las hermosas gradas del Fiscal, no sería una faena fácil para los talquinos, que han visto como su localía había sido vulnerada con frecuencia en el pasado, más aún con el ¨fantasma de la C¨ acechando por todo la alameda piducana.

Ni la justicia parecía querer nada con el rojinegro, un gol no subido al marcador, cuando la pelota había traspasado la línea de sentencia impedía que se abriera la cuenta a su favor, más aún con escasa la producción ofensiva, con volantes que intentaban proyectarse por las bandas, pero sin eficacia.

Cuando corría el primer minuto de adición se sucedieron las mejores oportunidades de gol del elenco talquino, un contragolpe comandado por Bielkiewicz, que fu desestabilizado por un defensa valdiviano y que como último hombre debió ser expulsado, no fue aprovechado por el ariete que estrelló su remate en la humanidad del portero. Tras cartón fue Felipe Fritz quien en una posición similar si pudo abrir la cuenta ante la salida del meta, la pelota ingresó hasta el arco lentamente, casi como una película de terror. Con la ventaja mínima del local se fueron al descanso.

Segundo Tiempo

Rangers dominaba el partido sin lucir, las lagunas futbolísticas de Luna se hacían desesperantes, sin embargo no hay nadie con su precisión en la última jugada, lo que quedó en evidencia en el minuto 57, cuando habilitó con maestría a Pezoa que marcó con elegancia el 2 a 0 para Rangers, con una perfecta parábola ante la salida del meta valdiviano.

Valdivia dejaba en evidencia su último lugar en la tabla y poco hacía por poner en peligro la portería de Peric, Rangers tuvo una clara oportunidad de marcar el tercero en los pies de Saldías, que pifió en plena área mayor tras gran asistencia de Luna.

Los dirigidos de Astorga toman aire, pero no se pueden confiar, todavía no se ve solidez en ninguna línea, más aún en la zona de ataque donde el fútbol se convierte en el deporte más hermoso del planeta. Su próximo rival será Barnechea en condición de visita.

Estadísticas:

Rangers (2): Nicolás Peric; Jaime Luciano Gaete, Lucas Domínguez, Diego González, Sebastián Villegas, Diego Pezoa (77’ Roberto Saldías), Christian Pavéz (86’ José Barrera) , Francisco Silva, Jorge Luna, Diego Bielkiewicz, Felipe Fritz(77’ Michael Ríos). DT: Emiliano Astorga. 

Deportes Valdivia (0): Diego Figueroa, Christian Jelvez, Diego Muñoz, Víctor González, Cristhian Venegas, Carlos Opazo (45’ Patricio Jerez), Pablo Leal (69’  Ignacio Torres), Mathías Vidangossy  (62’ Nicolás Servetto), Christopher Ojeda, Eric Pino, Francisco Ibáñez. DT: Arturo Norambuena.

Goles: 46’, 1-0, Felipe Fritz; 57’, 2-0, Diego Pezoa.