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Durante esta mañana el presidente Sebastián Piñera expuso un discurso ante la 75° Asamblea General de la ONU, el cual se extendió durante cerca de 30 minutos.

En la instancia, el mandatario habló sobre la situación del país golpeado por el estallido social y el coronavirus. Sobre las protestas iniciadas el 18 de octubre, sostuvo que las demandas "se venían acumulando desde hace muchas décadas. El Gobierno escuchó con atención, con sensibilidad y con un sentido de urgencia y puso en marcha una nueva agenda social", y agregó que "lamentablemente, y aprovechándose de estas manifestaciones, grupos minoritarios provocaron una enorme explosión de violencia con incendios, disturbios, destrucción y delincuencia que no respetaron a nada ni a nadie".

El jefe de Estado detalló que la violencia causó "un grave daño al cuerpo y alma de Chile. En democracia no podemos tolerar ninguna forma de violencia, la violencia y las amenazas son incompatibles con una sociedad democrática", y agregó que su gobierno "tomó todas las medidas y todas las precauciones posibles y necesarias para garantizar el respeto de los derechos humanos de todos nuestros compatriotas", destacando que “vamos a hacer todos los esfuerzos para que en Chile no haya impunidad, ni para los que vulneran los DDHH, ni para los violentistas que atentan contra nuestra sociedad”.

Adicionalmente, Piñera criticó la guerra comercial entre Estados Unidos y China, y también la violación a los DD.HH. por parte del régimen venezolano. "Estamos convencidos de que la mejor solución para Venezuela es la constitución de un Gobierno de transición que realice elecciones libres y democráticas", declaró el mandatario.